El vicencanciller guatemalteco Eduardo Hernández agradeció el donativo al pueblo mexicano, así como a Ebrard y al presidente Andrés Manuel López Obrador.
La subsecretaria para Asuntos Multilaterales y de Derechos Humanos de México, Marta Delgado, por su parte, aseguró que para el país norteamericano “no habrá alivio hasta que toda la región de América Latina y el Caribe podamos tener controlada la pandemia”.
Además, subrayó que en foros internacionales el país al que representa “ha pugnado porque el acceso a las vacunas sea justo y equitativo y para que exista una solidaridad internacional en la distribución de este recurso vital”.
“México quiere actuar en consecuencia de la solidaridad internacional que pedimos en las Naciones Unidas y en foros internacionales”, consideró.
La funcionaria mexicana concluyó que Guatemala es un “país hermano, vecino de nosotros, muy querido”. Por eso el presidente López Obrador y el canciller Ebrard han tenido la preocupación y ocupándose de la relación bilateral tener esta segunda donación de vacunas AstraZeneca.
La vacuna que llegó este martes a Guatemala es envasada en México y producida en Argentina, aseguró la subsecretaria.
Hasta el momento, Guatemala ha recibido más de 6.58 millones de dosis, en su mayoría donadas por los Gobiernos de Estados Unidos, México, India e Israel; mientras que el Gobierno ha adquirido fármacos por medio del mecanismo Covax, de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de compra directa al Fondo Ruso de Inversión Directa.
Del total de vacunas administradas, el 38% ha sido de Moderna, el 36% de AstraZeneca y el 26% de Sputnik V, mientras que el 54% de los inmunizados son mujeres y el resto, hombres, de acuerdo con información del tablero de situación de la pandemia del Ministerio de Salud.
Hasta ahora el país centroamericano acumula 373,047 casos confirmados de Covid-19, y de ellos 33,799 están activos y 10,483 han fallecido.