Las deficiencias de la procuración de justicia en Puebla

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Por. Itandehui Rodríguez / @Itandehui_RoMa

Espero que hayan tenido excelente fin de semana, yo no vi ni las carreras, porque no le entiendo, ni la pelea, aunque lo intenté. Salí con una amiga dispuesta a fingir que sabemos mucho de box y a ver la pelea en algún bar o restaurante de la ciudad y, como hay muchos lugares nuevos “post pandémicos”, no nos dimos cuenta de que nos metimos a un antro muy temprano y no a un lugar dónde fueran a transmitir la pelea, par de… ¡En fin! Recordé cuánto me gustan los antros y que nací pera la fiesta, pero esa es otra historia.

Bueno, pero no todo el mundo se la pasó de fiesta como yo, algunos trabajaron como fue el caso de la Comisión de Procuración y Administración de Justicia del Congreso del Estado que preside mi querido amigo, el diputado Eduardo Castillo.

Al C. Diputado lo conozco hace algunos ayeres, más de los que quisiera admitir, si a alguien puedo reconocerle trabajo, lealtad y compromiso con sus proyectos y su equipo, es a Lalo, pero además que se trata de un hombre congruente y ayer lo confirmé nuevamente, al escuchar sobre la presentación del Plan de Trabajo de su Comisión para el Periodo 2021-2024, dijo un par de cosas que merecen especial atención.

Comentó que la misión de la Comisión “es la de generar una legislación que fortalezca a las instituciones de procuración y la administración de justicia en Puebla, dotándolos de un ordenamiento jurídico óptimo para responder eficaz y eficientemente a las demandas de la ciudadanía, generando un entorno que coadyuve a mejorar el desarrollo humano y la calidad de vida de las y los poblanos. Que permita crear condiciones legales para fortalecer el estado de derecho”.

Debemos recordar que fue el 16 junio de 2020 que se publicó el reglamento de la ley dónde se estableció la organización, funcionamiento y ejercicio de las atribuciones de la Fiscalía General del Estado, este reglamento determina la desconcentración de las áreas que conforman esta institución encargada de investigar y perseguir delitos. Sin embargo esta desconcentración, en un intento de hacer a su estructura muy similar a la de la Fiscalía General de la República, no ha tenido el resultado esperado para el estado, esto debido a que, aunque es cierto que incrementó la presencia de la Fiscalía en el estado y llegó a más municipios, no redunda en resultados debido a que no hubo incremento sustancial en la plantilla de personal; esto implica que las Agencias de Ministerio Público y que los policías y peritos bajo su mando en las oficinas, son menos, evidentemente esto significa que, en el caso de la delincuencia, en lugar de encontrarse con un gran y robusto aparato de procuración de justicia que le intimide, se topa con oficinas donde hay dos pelados y una secretaria y eso ni a mí me asusta.

Aún cuándo se han hecho grandes esfuerzos por incrementar la plantilla de personal y a pesar de las convocatorias lanzadas para contratar a más funcionarios, la cantidad de renuncias que están presentado son realmente alarmantes y, por supuesto nadie los puede culpar, sus actividades son de altísimo riesgo y las cargas de trabajo inhumanas, lo que los lleva a preferir su vida y su libertad antes que el trabajo y, reitero, absolutamente nadie podría culparles por eso. El cansancio es un gran traidor, en algunos casos les puede significar cometer un error en algún procedimiento y acabar en la cárcel o equivocarse en el ejercicio de sus funciones en campo y perder la vida o poner en riesgo la de sus compañeros.

Me encantaría escuchar pronto del diputado Eduardo Castillo, ¿a qué se refiere con optimizar y fortalecer a las instituciones? ¿Cuál es la estrategia? ¿Cuál es su visión a corto y mediano plazo? ¿En qué porcentaje peleará por incrementar los presupuestos destinados a la materia? Pero, sobre todo, si esta visión empata con la del Fiscal Gilberto Higuera Bernal.

Pese a los esfuerzos del Fiscal para reestructurar a la institución y cambiar su imagen, la realidad es que no hemos visto grandes resultados y la percepción ciudadana sigue sin ser óptima y las deficiencias de la procuración de justicia en Puebla siguen siendo graves.

Recientemente alguien me pedía que escribiera sobre la mejora en la percepción de seguridad en el estado y me negué a hacerlo, no puedo hablar de algo en lo que no creo y menos después de la tragedia de la semana pasada en San Pablo Xochimehuacán. Las autoridades han fallado sistemáticamente y no con esto culpo al Fiscal Higuera, aunque tampoco lo exculpo, todos y cada uno de los vinculados con la procuración y administración de justica que han pasado por el gobierno desde la década de los 60’s en Puebla, tienen parte de culpa, incluidos por supuesto gobernadores y alcaldes, más los que entre 1960 y 1980 permitieron el crecimiento desbordado de la ciudad hacia el nororiente y norponiente, sin vigilar que los atlas de riesgo fueran actualizados y que en ciertas zonas de la ciudad se impidiera la construcción de viviendas.

Este crecimiento desbordado y desordenado, es producto de la falta de políticas públicas que permitieran en su momento a las personas que llegaron a invadir predios, la oportunidad de acceder a viviendas dignas en zonas regularizadas. Estamos hablando de un problema transversal y estructural producido por gobiernos federales que han desatendido a las necesidades de la población. Con esto también digo que hay grandes y graves fallas de parte de la administración actual, dirigida por Andrés Manuel López Obrador, quién hasta el momento solo nos ha dirigido un tuit de solidaridad y apoyo. Ojalá que pronto se acuerde que, además, hay que mandar dinero para indemnizar a las personas afectadas.

Podría seguir escribiendo, lo cierto es que deseo y espero que el trabajo del diputado Castillo se vea reflejado en el incremento de la seguridad y la tranquilidad de los poblanos, ya estamos cansados de autoridades que solo dejan pasar el tiempo en lo que se cumplen sus encargos y estoy segura de que Lalo, no será uno más de esos.

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